Utopia Siglo XXI

 

 

Diario educativo de Feliciano Robles, para tratar de conseguir una Educacion integradora y liberadora en los valores humanos que mas dignifican a las personas.

 

Inicio

Archivos

Quién soy

Enlaces

 

Buscar en Utopia

 

UTOPÍA

Si damos un paso para lograrla, ésta se aleja un paso; si damos dos pasos, también se aleja dos pasos; así que la UTOPÍA sirve para CAMINAR.

 

 This page is powered by Blogger. 

 

Califica en Bitacoras.net:

 

 

Google

domingo, febrero 09, 2003

 

ETA, España: Y ahora ¿qué?

Feliciano Robles Blanco

Una vez más se ha producido un asesinato, del cual las personas que tenemos sentimientos no podemos comprender y repudiamos desde lo más hondo de nuestros sentimientos.

Voy a contarles una historia que nunca he contado hasta ahora, y que en algunos pasajes puede estar alterada, porque ya no recuerdo las fechas exactas, ni si verdaderamente ocurrió tal y como yo la cuento o ha sufrido ya algún deterioro, pero en lo esencial si es verdadera.

Quiero decir con esto que el conflicto vasco es tan antiguo que ya nos confunde la memoria, y nunca sabremos bien como empezó y mucho menos sabemos como podrá acabar.

Era el año de 1976, y una tarde estaba yo sentado plácidamente en la plaza principal de Eibar, cuando al anochecer apareció una gran manifestación portando una gran ikurriña y exigiendo su legalización. Al momento apareció en la plaza una compañía de Fuerzas de Seguridad y disolvió la manifestación con gran violencia y la ikurriña quedó hecha añicos y dispersa por la plaza.

Al día siguiente apareció una ikurriña colgada en el campanario de una iglesia y el comandante de la Guardia Civil envió a una pareja a que descolgasen la bandera del campanario, pero ETA había colocado un paquete bomba sujeto al palo de la bandera, así que cuando los guardias civiles empezaron a manipular la bandera les explotó el paquete bomba y ambos murieron.

Uno de aquellos guardias era de mi pueblo y habíamos sido compañeros de mesa en el colegio y la noche antes del atentado había estado tomando unos vinos con él en Eibar y me dijo que tenía mucho miedo.

Yo por aquel entonces trabajaba de Ingeniero y había ido a una Cooperativa de Elgoibar a recepcionar unas máquinas herramientas que había adquirido la empresa de Barcelona en la que yo trabajaba, y el día del atentado yo había estado trabajando todo el día con dos jóvenes ajustadores que estuvieron poniendo las máquinas a punto.

Me alojaba en el Hotel Arrate, y después de cenar estuve en la cafetería, y en un rincón de la misma había un reducido grupo de hombres subidos de alcohol, y planeando un escarmiento, por culpa del atentado. Sobre las doce sentí el ruido de un coche que frenó en seco delante del hotel, y de aquel grupo de hombres se fueron dos y los demás les dijeron. ¡A ver si hacéis un buen trabajo!.

Al día siguiente aparecieron muertos dos jóvenes de la localidad, uno de ellos era el ajustador que había estado trabajando conmigo el día antes, y a la hora en que colocaron la bandera y la bomba en la torre de la Iglesia, él estaba trabajando conmigo.

Quiero decirles, que por aquel entonces era Ministro de Gobernación Manuel Fraga y en Euskadi había Estado de Excepción, y Fraga había dicho que mientras él fuese Ministro no se legalizaría la Ikurriña porque era una copia deficiente de la bandera inglesa.

Sucesos como este o parecidos, ocurrieron varios aquel año, y la ikurriña fue legalizada al cabo de unos meses.

Yo pregunto, ¿fue justa tanta muerte y tanta tragedia por culpa de una bandera cuándo en las demás Comunidades se utilizaban sin ningún problema?

Desde entonces toda la violencia que hay en Euskadi me parece totalmente injusta, innecesaria y estéril, que sólo conlleva el sufrimiento y el dolor a las personas afectadas.

Pido a las personas que vivan en Euskadi y puedan tener un mínimo de cordura y autoridad moral ante su pueblo, que establezcan por fin una negociación que conlleve al diálogo y al final de la violencia y la reconciliación para que todo el mundo pueda vivir en paz cualquiera que sean sus ideas políticas.

 

Escrito por Comentarios