Utopia Siglo XXI
Diario educativo de Feliciano Robles, para tratar de conseguir una Educacion integradora y liberadora en los valores humanos que mas dignifican a las personas.
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UTOPÍA
Si damos un paso para lograrla, ésta se aleja un paso; si damos dos pasos, también se aleja dos pasos; así que la UTOPÍA sirve para CAMINAR.
martes, septiembre 09, 2003
¿Qué nos jugamos en Cancún?En Cancún, México, del 10 al 14 de septiembre de 2003, se celebra la quinta Conferencia Ministerial de la Organización Mundial del Comercio: la ya tristemente famosa OMC.
El objetivo principal de la reunión de Cancún es evaluar los progresos realizados en las negociaciones para la liberalización del comercio, sobre todo en lo relativo a los productos agrícolas y a los servicios. Porque el 1 de enero de 2005 tiene que concluir con éxito esta ronda de negociaciones (que comenzó en noviembre de 2001 el Doha) para que, inmediatamente, de inicio la siguiente y progresivamente abrir al comercio mundial y privatizar todos los productos y servicios (como la educación y la sanidad pública.
La OMC es una agrupación 146 países, 550 empleados y sede en Suiza, creada, al margen de las Naciones Unidas, con la única función de liberalizar el comercio internacional, establecer las normas que lo rijan y rechazar todo recurso de los Estados a la salvaguardia de sus economías. La OMC no entiende de cuestiones éticas, sociales, medioambientales o de índole similar. Cualquier medida de protección de la salud pública, la vida de las personas o el medioambiente, puede ser considerada por la OMC una disposición discriminatoria o restrictiva del comercio internacional y por tanto sancionable.
La ideología que inspira el modo de actuar de la OMC parte de una antigua creencia de los inicios del capitalismo denominada "principio de la ventaja comparativa" de las naciones, que viene a decir que en el comercio libre todos ganan, los ricos y los pobres. Se supone que facilitando el acceso a los mercados, los países menos adelantados obtendrán beneficios del comercio internacional para su desarrollo económico y el alivio de la pobreza.
Pero la realidad demostró y demuestra que el viejo dogma liberal del libre mercado y la "ventaja comparativa" favorece a los ricos y lesiona a los pobres. Su aplicación significa un aumento del comercio de los países desarrollados y la pérdida de los mercados domésticos de los países en desarrollo, que no pueden competir en igualdad de condiciones por sus retrasos estructurales en tecnología y educación, volviéndose más dependientes y subsidiarios que nunca.
¿Quién gana y quién pierde con la OMC?
En la liberalización del comercio hay ganadores y perdedores, aunque la OMC se empeñe en decir lo contrario. Ganan los que más tienen:
* los propietarios de las empresas multinacionales (sobre todo los bancos), que son los más interesados en la liberalización del comercio, porque agrandan sus mercados y pueden vender sus productos y servicios en todo el mundo; las elites ricas de los países pobres: altos funcionarios y ejecutivos de las multinacionales, fomentando la corrupción y perpetuando seculares desigualdades de sociedades en eterno subdesarrollo;
* los consumidores, sobretodo de los países ricos (antiguos ciudadanos), pues pueden comprar más barato y más variedad de productos.
Y pierden los de siempre:
* las medianas y pequeñas empresas locales, que no pueden competir en los mercados internacionales, ni ser apoyados por sus gobiernos, a los que son arrebatados los servicios de proximidad en beneficio de las grandes corporaciones multinacionales;
* los asalariados en los países desarrollados, que ven debilitados sus derechos laborales en beneficio de la competitividad mundial, incrementándose el desempleo y la precariedad;
* los campesinos, que se les exige un comercio orientado a un mercado que no les beneficia o les priva de subvenciones;
* los niños de los países pobres, que son explotados en aras de la competitividad, víctimas de la "ventaja comparativa" de que en su país no se persigue ni penalizada la esclavitud laboral infantil o de todo tipo;
* el medio ambiente, que es de todos -otro daño colateral de la "ventaja comparativa"- para que los Estados depredadores orientados al comercio internacional puedan arrasar la naturaleza sin mayores controles.
Bajo la OMC se está creando un sistema global de reglas de obligado cumplimiento donde las corporaciones transnacionales tienen todos los privilegios, los gobiernos tienen todas las obligaciones, y donde la democracia, la dignidad humana y los recursos ambientales quedan devaluados y transformados en mera mercancía.
¿Qué pretendemos los movimientos sociales en contra de esta globalización de las desigualdades?
Desde los movimientos sociales pedimos la desaparición de la OMC, la paralización de sus acuerdos ilegales e injustos y la vuelta del comercio internacional al ámbito de las Naciones Unidas, que promuevan:
* El comercio justo de productos que respeten los Derechos Humanos de los ciudadanos, de los trabajadores, de los niños, de las mujeres y del medio ambiente.
* La seguridad y autosuficiencia alimentaria de los pueblos, que excluya la privatización de la vida a través de las semillas transgénicas y la producción de alimentos orientada al comercio mundial en vez de a paliar el hambre.
* La defensa de lo público (servicios públicos, espacio público, ...), lo que es de todos, las políticas redistributivas, amenazadas por la privatización, en beneficio de los menos.
¿Qué podemos hacer?
La OMC considera su actividad, la regulación del comercio mundial, como un asunto puramente técnico, una cuestión de expertos basada en "leyes naturales" en la cual los ciudadanos y los gobiernos democráticos poco o nada tienen que decir.
Contra ello:
* Infórmate; Internet te ofrece numerosa información variada e independiente de los medios oficiales y empresariales de comunicación (televisiones y periódicos); aprende a utilizar la Red; profundiza sobre qué está pasando en la OMC, dónde nos quieren llevar con el Acuerdo General sobre el Comercio de Servicios (AGCS) y la privatización de los servicios públicos; conoce las propuestas de las organizaciones que luchan en contra.
* Comenta lo que vayas descubriendo con tu familia, tus amigos, tus compañeros de trabajo; haz de la OMC un tema de conversación.
* Actúa: hazte rebelde, pasa a la acción; escribe y comunica lo que sabes; participa de las campañas que se organicen, pon en evidencia al poder (local o global) y denuncia públicamente los intereses económicos que le mueven; multiplica las resistencias.
No te conformes: piensa en otro mundo y hazlo posible.
ATTAC Sevilla Asociación por una Tributación a las Transacciones financieras especulativas en Ayuda a los Ciudadanos
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sevilla@attac.org
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