Utopia Siglo XXI
Diario educativo de Feliciano Robles, para tratar de conseguir una Educacion integradora y liberadora en los valores humanos que mas dignifican a las personas.
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UTOPÍA
Si damos un paso para lograrla, ésta se aleja un paso; si damos dos pasos, también se aleja dos pasos; así que la UTOPÍA sirve para CAMINAR.
sábado, julio 24, 2004
Música en los automóviles
Feliciano Robles Blanco
Soy padre de dos hijos varones de 28 y 21 años respectivamente y ambos tienen automóvil para su uso propio tanto para sus desplazamientos al trabajo como para sus desplazamientos de ocio los fines de semana y vacaciones.
Somos en mi casa, pues, una más de los millones de familias que vivimos angustiados, cuando vemos partir a nuestros hijos en sus automóviles y no recobramos la paz hasta su regreso. Porque son el grupo mayor de riesgo que tienen de sufrir un accidente de tráfico. De hecho mi hijo mayor ya tuvo un accidente y milagrosamente salió ileso aunque el coche quedó para el desguace. Salió ileso por dos motivos diferentes, uno preventivo, que fue llevar puesto el cinturón de seguridad, y así aunque el coche dio varias vueltas, como estaba bien sujeto no le pasó nada, y el otro por arte de la diosa fortuna, que en vez de volcar hacia la derecha en un campo de maiz, si lo hace hacia la izquierda hubiese caído en un canal de riego donde habría perecido ahogado.
A estas edades no nos quedan muchos argumentos a los padres para exponer a nuestros hijos la necesidad de prudencia y lo bueno que sería eliminar aquellos viajes rutinarios o que no tengan un objetivo concreto que valga la pena el desplazamiento.
Muchos de los viajes que hacen los jóvenes son totalmente innecesarios.
Sin embargo ayer encontré un filón para argumentar algo con mi hijo mayor. El es muy aficionado a las matemáticas y me dijo: Mira papá, yo se que cuando voy conduciendo el coche existe una probabilidad indefinida de poder tener un accidente y matarme en el mismo.
Entonces le dije. Esa probabilidad no es fija sino variable, y las personas podemos reducir bastante la probabilidad de tener un accidente. Veamos algunos ejemplos:
Entre llevar o no sujeto el cinturón de seguridad varía bastante la probabilidad de morir en un accidente.
Entre beber o no beber varía bastante la probabilidad de sufrir un accidente.
Entre correr por encima de los límites o ir a la velocidad adecuada, varía bastante la probabilidad de sufrir un accidente.
Entre circular con prisas o hacerlo sosegado varía bastante la probabilidad de sufrir un a accidente.
En fin hijo, le dije, la probabilidad cero de sufrir un accidente de tráfico no existe, pero respetando el código de la circulación y teniendo en cuenta todos los elementos que pueden desencadenar un accidente de tráfico, podemos conducir un automóvil con cierta seguridad y tranquilidad.
Noté un punto de inflexión en su voz, como queriéndome dar la razón. Eso es lo importante, que sepamos razonar las cosas a los jóvenes, el entendió perfectamente mis argumentos.
Con el pequeño tengo otra batalla que ganar y que quiero llamar la atención a las autoridades que diseñen campañas de prevención sobre el uso adecuado de los equipos de música que llevan lo s automóviles. Mi hijo pequeño se distrae mucho con el equipo de música del coche, y lleva muy alto el volumen de la misma.
Una música alta es embriagadora y muy distractora y si van varios jóvenes en el coche altera y distrae mucho al conductor y puede desencadenar un accidente por distracción o exceso de velocidad.
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